Reseñas de Rol VI - Vampiro: Edad Oscura

Estimados damas y caballeros.

Ustedes ya saben que soy un fanático de Mundo de Tinieblas, así que les aburriré con otra reseña de un manual que, si bien me gusta su versión en la actualidad, reconozco que adoro su “versión histórica”. Es un juego que nos ofrece historias en fríos castillos, caminar por las sombras de oscuros callejones a la luz de una antorcha, temer la ira del maligno o enfrentarse a horrores en siniestros bosques y tumbas. ¿Quién no ha soñado una vez con ser un vampiro en los Cárpatos? Saben de qué juego estoy hablando, ¿verdad? Hoy, en Pifias & Rol voy a reseñarles Vampiro: Edad Oscura (20 aniversario).

Se trata de un producto derivado de Vampiro: la Mascarada que tiene la friolera de tres ediciones, siendo la “versión histórica” más popular de los juegos de White Wolf. La primera se publicó en 1996 con el título de Vampiro: Edad Oscura, la segunda en 2002 con un cambio de título a Edad Oscura: Vampiro (y de la que crearían una serie de manuales independiente con las versiones medievales de los otros juegos, empleando además un sistema ligeramente distinto al Sistema Narrativo que todos conocemos), y la última sería la edición 20 aniversario (ya publicada por Onyx Path) en 2015. Las dos primeras ediciones en España fueron publicadas por La Factoría de Ideas en 1996 la primera (unos meses después de la versión inglesa) y en 2003 la segunda. Por otro lado, Nosolorol y Biblioteca Oscura publicaron la edición que voy a reseñar en 2016.

Denle al play y déjense llevar.

Antes de empezar, me gustaría mencionar que la metatrama de las tres ediciones abarca desde 1197 d.C. (justo antes de la cruzada que destruiría Constantinopla, evento importante en Mundo de Tinieblas) en la primera edición hasta 1242 d.C. en la tercera. ¿Esto quiere decir que las aventuras y campañas oficiales no son compatibles entre ediciones? En absoluto, se puede jugar todo con cualquiera de las tres, creo que es cuestión de mover la fecha con la edición usada y adaptar las fichas de los PNJ. Además, hay un suplemento de la primera edición, Lobos Marinos, que nos permite jugar con vampiros en época vikinga (del 793 al 1100 d.C.), con lo que se puede disfrutar de este juego en un periodo histórico bastante amplio.

Vampiro: Edad Oscura nos ofrece una gama de personajes bastante más amplia que los trece clanes clásicos, ya que la línea entre algunos conocidos (como los Giovanni y los Tremere) es tan delgada que poca diferencia hay con una línea de sangre (como los agonizantes Salubri o los temidos Baali). Aún no existen la Camarilla o el Sabbat, así que cada ciudad se administra bajo la voluntad de un Príncipe y su interpretación de las Tradiciones. Los hay que tienen modelos que estas sectas imitarán al crearse y los que gobiernan la urbe en grupos, como el Triunvirato de Constantinopla. La única división entre clanes es si pertenecen a un Clan Mayor (los que tienen el poder y el prestigio en la zona) o a un Clan Menor (los parias y sirvientes de los Clanes Mayores). Por citar un ejemplo, en Constantinopla los Clanes Mayores serían los Toreador (descendientes de Miguel), los Ventrue (descendientes de Antoninus) y los Tzimisce (descendientes del Dracón), siendo el resto Clanes Menores. En cambio, en el norte de Europa, los Gangrel y sus líneas de sangre son los Clanes Mayores.

Teniendo en cuenta esto, no es raro encontrar una coterie formada por clanes del Sabbat, clanes independientes y clanes de la Camarilla. Lo que sería muy extraño es que un Gangrel o un Tzimisce acepten compartir la compañía de un Tremere o que un Assamita (o Banu Haqim) acepte ir en el mismo grupo de un Baali.

Otra de las grandes diferencias es que nuestros Cainitas (que no Vástagos, la jerga vampírica cambia entre ambos juegos) no tienen por qué seguir el Camino de la Humanidad, sino que el juego ofrece muchas formas de lidiar con la Bestia, el lado siniestro de cada vampiro que les susurra perversiones al oído, y controlarla, lo que, a mi parecer, da más opciones de personaje y permite ahondar en el horror de ser un monstruo, un penitente al que Dios ha castigado por sus pecados, una bestia salvaje o un ser frío que ve a los mortales como meras piezas de ajedrez. Cada uno de estos Caminos o Sendas tiene una serie de pecados que nos permite medir el resultado de nuestras acciones y si la Bestia va ganando la pelea.

Las tiradas se realizan siguiendo el conocido Sistema Narrativo (sumar un Atributo y una Habilidad con valores entre 1 y 5 y tirar un número de d10 a una dificultad establecida por el Narrador, generalmente 6) de White Wolf que Onyx Path ha pulido e intentado unificar entre sus distintos manuales, aunque se aprecian cambios en el combate, intentando que se adapte más a las estrategias y técnicas de la época, además de a los reflejos superiores de los vampiros. Por citar un ejemplo, en Vampiro: Edad Oscura restamos un dado a cada acción extra y sumamos 1 a la dificultad, mientras que en Mago: la Ascensión debemos escoger la reserva de dados menor y dividirlos entre el número de acciones que vamos a realizar. Lo que veo es que son sistemas que se parecen, pero esas sutiles diferencias hacen que se tenga que coger uno de base y adaptar los otros si se quieren narrar historias mixtas.

A mayores, aparte del manual básico, que es bastante extenso, tenemos dos suplementos traducidos para esta la línea del veinte aniversario:

• El Tomo de los Secretos: amplía las reglas de hechicería de sangre para Assamitas, Tzimisce, Lasombra, Seguidores de Set; amplía también las opciones de Necromancia y añade, finalmente, ideas para ordenes de caballería cainitas, fes y brujería humana.
• El Companion: añade contenido de los clanes, describe varias ciudades por encima, da reglas para construir el dominio de nuestros vampiros y amplía el combate medieval.

Pero es que no hay más material oficial, tan solo una aventura introductoria en PDF, así que como ven, me parece muy poco para la que fue probablemente la tercera línea más vendida de White Wolf en su época dorada. Nos encontramos ante una edición del veinte aniversario con mucho potencial pero poco aprovechado por la editorial americana encargada de ello, teniendo, en algunos países, que sacar suplementos regionales para rendirle el tributo que realmente se merece. Sinceramente, creo que merece la pena invertir en las novelas y en los nocturnos de 2ª mano, donde se pueden encontrar las joyas olvidadas de la Larga Noche.

Finalmente, debo puntualizar (aunque seguro que ustedes lo han deducido ya) que Vampiro: Edad Oscura ofrece una experiencia muy distinta a Vampiro: la Mascarada. En la actualidad, los Vástagos viven ocultos de la sociedad, moviendo los hilos entre las sombras a la vez que temen las nuevas tecnologías y la ruptura de la Mascarada. En la edad media, los vampiros se sienten poderosos, incluso exponiéndose sin temor ante los mortales, siendo conocedores de que el folklore y las supersticiones locales les protegerán o arrojarán mentiras sobre ellos, sus hábitos y debilidades. Sin embargo, esto es un arma de doble filo, pues la iglesia tiene el poder de acabar con los Cainitas demasiado confiados. En cambio, en la actualidad, la falta de fe hace que los posibles vampiros sean tomados con incredulidad o un creepypasta. Unos son las sombras tras el trono o los hombres del saco, los otros son las manos negras que nos manipulan a tu antojo.

Espero que les haya gustado mi reseña.

Como siempre, suyo afectísimo, para Pifias & Rol.

Adam Graves.